Aclarar la piel es uno de los objetivos que muchas personas desean. En este caso, habría que saber que la almendra es un fruto seco reconocido por sus nutrientes, pero también puede ser un gran aliado para la piel. Al combinar la almendra con otros productos se puede elaborar tratamientos para mantener una piel sana, cuidada y más clara.
Almendras y huevo
Un estudio realizado por la Universidad de Sungkyunkwan, señala que otra opción para usar las almendras como blanqueante es al mezclarlas con huevo. El huevo es rico en proteínas y cuenta con numerosas aplicaciones cosméticas como hidratar la piel, reafirmante contra las arrugas y tratamiento para cutis graso, al combatir el brillo y la consistencia aceitosa de la piel. Para ello, vierte a un recipiente dos cucharaditas de almendra pulverizada, una cucharadita de miel, una cucharadita de agua caliente y una yema de huevo. Mezcla hasta integrar por completo y obtener una pasta suave. Aplica una capa gruesa sobre la zona afectada y deja actuar durante 30 minutos. Transcurrido el tiempo, humedece las manos y retira la mezcla dando un masaje ligero.
Almendras con leche
Otra de las formas tradicionales de usar las almendras para aclarar la piel, es al combinarla con leche. La leche tiene propiedades blanqueantes, si se aplica constantemente y se combina con ácido ascórbico. Incluso las propiedades humectantes de la leche la hacen un ingrediente esencial en las mascarillas para una piel seca. Para ello, pon a remojar cuatro almendras con agua durante toda la noche. Al día siguiente, cuela y muele junto con una cucharada de leche hasta obtener una consistencia cremosa. Aplica sobre la piel y deja actuar. Trascurrido el tiempo, lava el rostro con agua tibia. Repite el proceso diario durante dos semanas.
Almendras y miel
La miel es un alimento rico en vitaminas y minerales que cuenta con propiedades antibacterianas que pueden ser de gran ayuda para el acné. Así que la combinación de almendras y miel ayudan a hidratar la piel y favorece la desaparición de manchas. Para ello, habría que colocar en un recipiente de plástico una cucharadita de aceite de almendras, una cucharadita de zumo de limón, una cucharadita de miel y una cucharadita de leche en polvo. Mezcla hasta homogeneizar. Aplica en la piel y deja actuar durante 20 minutos. Transcurrido el tiempo, retira con agua fría. Repite el proceso tres veces por semana para mejores resultados.
Estos tratamientos a base de almendras son muy fáciles de realizar y seguramente cuentas con los ingredientes en casa. Recuerda que debes ser constante con esos tratamientos para obtener mejores resultados.
Imagen: skinexpert