Las bicicletas reclinadas traen consigo varios puntos a favor. Pero se dice que existen ciertos detalles que no las hacen tan eficaces como uno cree. Así que para desmentir todo ello, sigue leyendo para que te enteres cuáles son los beneficios de las bicicletas reclinadas para que puedas incluirlas en tus entrenamientos.
Beneficios
Las bicicletas reclinadas son un tipo de vehículo en el que la persona se pone en una posición más cómoda. Suelen ser rápidas en superficies planas, pero algo lentas en subidas, ya que tienen mayor peso que una bicicleta común. A pesar de que son bicicletas reclinadas que no forman parte de los Juegos Olímpicos, los ciclistas han llegado a marcar nuevos récords.
Los gimnasios han implementado el uso de bicicletas reclinadas estáticas, reemplazando las bicicletas comunes. Está claro que las bicicletas reclinadas brindan una posición agradable y resultan más veloces, pero habría que conocer los beneficios.
Comodidad. Las bicicletas reclinadas conservan una postura relajada y sin mucho esfuerzo, convirtiéndose en una excelente opción para personas mayores o deportistas que desean ejercitar las piernas sin poner tensión en el tren superior para evitar dolores de muñeca y tensión muscular.
Menos calor y frío. Un pequeño problema de las bicicletas convencionales, es que en el verano tiende a ser un poco molesto, ya que el sol afecta el cuerpo. Sin embargo, con la bicicleta reclinada mantiene la espalda completamente protegida y es una gran ventaja cuando hace frío.
Velocidad. Las bicicletas reclinadas son más rápidas en bajada y superficies planas. Incluso el cuerpo en una posición cómoda garantiza un mejor desempeño en el pedaleo.
Visión. El campo de visión de una bicicleta reclinada es extenso. De esta manera, es mucho más seguro que una bicicleta normal debido a que se puede observar el entorno sin ningún inconveniente.
Al entrenar con la bicicleta reclinada se trabaja toda la parte inferior del cuerpo. Siendo una gran alternativa para hacer ejercicio cardiovascular de bajo impacto. Se puede llegar a poner en práctica al recorrer distancias largas o cortas, o bien, usando una bicicleta estática.
Las bicicletas reclinadas aparentan ser inofensivas, pero en realidad son exigentes con los músculos de las piernas, lo que promueve el desarrollo muscular y el flujo de sangre. De esta forma, el vehículo funciona para terapias de rehabilitación deportiva.
En conclusión, las bicicletas reclinadas si pueden llegar a facilitar entrenamientos eficaces, siempre y cuando se realicen con la técnica adecuada y bien protegidos.
Imagen: eshowmagazine