Los ejercicios de Kegel también llamados ejercicios de suelo pélvico ayudan a fortalecer los músculos que se encuentran ubicados debajo del útero, vejiga e intestino grueso. Estos movimientos ayudan a personas con problemas de incontinencia urinaria o de control intestinal. De igual forma, resulta excelente para los hombres con disfunción eréctil. Los músculos del piso pélvico se debilitan con la edad, como todos los músculos. Así que habría que mantenerlos en forma con este simple movimiento.
Cómo realizar el ejercicio
Es importante encontrar los músculos del suelo del piso pélvico y, posteriormente, contraerlos y relajarlos de manera repetida. Imagina que debes detener el flujo de la orina o retener un gas. Así que el objetivo es contraer y mantener los músculos y, no depender de otros como los glúteos o el abdomen.
Para ello, acuéstate sobre una esterilla para que sea más fácil sentir y controlar las contracciones de los músculos del piso pélvico. Una vez que los domines, podrás practicarlos de pie o sentado.
Realiza contracciones cortas y relajaciones de al menos de 3 a 5 segundos. Ve aumentando de manera gradual y mantén un máximo de 10 segundos. El dominar las contracciones largas se requiere más trabajo. Considera relajar los músculos de entre cada repetición la misma cantidad de tiempo que la contracción.
Intenta realizar al menos 30 ejercicios de kegel todos los días. Pero es más eficaz distribuirlos a lo largo del día que hacerlo en una sola sesión. Así que elige un lugar donde te sientas cómodo para poder obtener resultados en poco tiempo.
No obstante, antes de practicar este ejercicio de Kegel debes de acudir con profesionales para que puedan asegurarse que no existen otros problemas relacionados con los síntomas. Así que es importante ir a la segura, ya que con la salud no se juega. ¿Qué dices, lo intentas?
Imagen: hospitallapaloma