El dolor referido es aquel que sentimos en una zona del cuerpo que no corresponde con el que ha sufrido una lesión o daño. Pero para explicar este fenómeno, es necesario entender el papel del sistema nervioso. Así que vayamos a descubrirlo juntos.
Motivos del dolor referido
Cuando sufrimos algún tipo de lesión resulta que el dolor se manifiesta en otras zonas del cuerpo diferentes al que está dañado. El responsable de ello, es el sistema nervioso, una estructura en donde se asienta toda la información que proviene de distintas partes del cuerpo. Pero habrá que tener en cuenta que todas las estructuras del organismo están interconectadas a través de dicho sistema.
El hecho de que aparezcan dolores a distancia del lugar de la lesión puede ser por varias causas. Dentro de las distintas teorías, la más aceptada podría ser un proceso de sensibilización central. Este concepto se refiere a una alteración en el asta dorsal de la médula espinal, es decir, el primer lugar en donde el sistema nervioso gradúa la respuesta de dolor.
Como resultado de esta alteración, se produce un aumento de la actividad sináptica en el asta dorsal de la médula espinal. Este proceso neurofisiológico, por una parte, hay una mayor respuesta de dolor y por otra, un incremento de la zona de distribución de dolor, lo que da lugar a un dolor referido.
En este punto, habría que distinguir dos tipos de dolor y que es posible confundirse. Pero las causas son distintas: El referido y el irradiado. El referido conocido como reflejo, es aquel que sentimos a distancia de su origen, en estructuras que están estrechamente conectadas y donde no hay lesión del nervio. Se trata de un dolor difuso, profundo y, en ciertas ocasiones, es difícil diferenciar cuál es el tejido responsable de dicho síntoma.
El dolor irradiado se produce por una irritación directa de un tronco o raíz nerviosa, lo que puede provocar dolor mucho más localizado en las estructuras enervadas por ese nervio. El más conocido es el dolor del nervio ciático.
Así que depende de la causa, los especialistas aplicarán un tratamiento para abordar la sintomatología. Por ello, es primordial averiguar qué tejido o tejidos son los responsables del dolor, así como en qué momento del proceso de curación se encuentra el tejido.
Imagen: aliviam