El sedentarismo es uno de los mayores factores de riesgo en el desarrollo de enfermedades cardiovasculares. Cuando escuches el término sedentario es fundamental que entiendas que hacer ejercicio durante unos pocos minutos al día y, rápidamente sentarse durante la mayor parte del resto del día, no es suficiente como para salir de esa categoría.
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Las largas horas que pasas sentado frente al ordenador o que permaneces inactivo físicamente están vinculadas a enfermedades crónicas como la diabetes, y esto podría ser, en parte, debido al incremento del envejecimiento a nivel celular.
Según un estudio publicado en la revista American Journal of Epidemiology llevado a cabo por investigadores de la Facultad de Medicina de la Universidad de California en San Diego, Estados Unidos, quienes pasan sentados más de 10 horas al día y realizan menos de 40 minutos de actividad física moderada a vigorosa tienen telómeros más cortos que quienes se mueven con mayor frecuencia.
Cada vez que una célula se divide, los telómeros se acortan, por lo que se usan como medida de envejecimiento biológico. Los telómeros cortos se han asociado con enfermedades crónicas como el cáncer, la diabetes y las enfermedades cardíacas.
Este estudio ha sido llevado a cabo en 1500 mujeres entre 64 y 95 años. Además, la capacidad corporal para responder a la insulina es afectada por un solo día de permanecer sentado por más de 10 horas, lo que hace que el páncreas produzca una mayor cantidad de insulina.
Otra investigación ha demostrado que quienes permanecían sentados por largos periodos de tiempo eran dos veces más propensos a padecer diabetes y enfermedades cardiovasculares, en comparación con los que estaban sentados el menor tiempo posible.
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