Si estas en búsqueda de algo dulce y saludable para terminar con broche de oro una comida balanceada, entonces esto es para ti. Una receta de cupcakes que además de ser vegana, repleta de sabor no requiere de horno ¿Qué más se puede pedir? Así que toma nota y sorprende a los tuyos con tan delicioso festín.
Qué lleva
- 200g de anacardos/castaña de cajú
- 200g fresas/frutillas
- 200 g papaya
- 100 g arándanos
- 130 g avellana
- 250 ml leche vegetal (a elegir)
- 10 dátiles sin hueso
- 15 g cacao en polvo
- 20 g aceite de coco
- Cantidad suficiente de sirope de agave
Cómo se elabora
- Remoja los anacardos durante 4 horas. Transcurrido el tiempo, escurre. Reserva.
- Para la base: Tritura los dátiles y las avellanas y, mezcla con el cacao hasta homogeneizar. Enseguida vierte la pasta sobre los moldes y aprieta hasta formar una capa de 1 cm de ancho (que quede bien compacta). Lleva a la nevera para que endurezca un poco.
- Para las cremas: divide los anacardos, la leche y el aceite de coco en tres recipientes. Luego incorpora en uno la papaya en trozos sin piel. En la otra las fresas y en el restante los arándanos. Vierte un poco de sirope de agave en cada uno, pero recuerda ser moderado.
- Mezcla perfectamente cada preparación hasta obtener una consistencia de crema y comienza a verter en los moldes. Para formar tres capas. Lleva a la nevera unas cuantas horas a que tome consistencia.
- Después del tiempo, saca, desmolda y decora con la fruta que desees ¡Listo!
¿Qué te parece? Seguramente se te hizo agua la boca. Ahora realiza tu propia versión, ya que quizás tengas tu fruta favorita. Solo ten en cuenta que esta receta va a variar en función de la fruta que le agregues. Pero de igual forma, es un postre rico en proteína vegetal gracias a su base de anacardos y avellanas. Siendo frutos secos que ayudan a mantener el sistema cardiovascular sano, ricos en vitamina B6 que refuerzan las defensas, así como repletos de ácido fólico.