Cada vez son más las personas que optan por llevar una vida saludable con la inclusión de una alimentación equilibrada, evitar fumar, beber alcohol y realizar ejercicio, entre otros. Sin embargo, también salen a la luz dudas frente a estos como si el ejercitarse puede afectar el crecimiento. Pero para desvelar este mito del ejercicio, nos adentramos en el tema.
Proceso de crecimiento
La estatura está determinada por la genética y por la hormona de crecimiento que se vincula con el proceso de desarrollo. Pero también es cierto, que existen algunos factores que pueden interferir en dicho proceso.
Entre los 12 y los 18 años de edad de una persona está en la etapa de transición entre la niñez y la edad adulta. Siendo de los momentos de crecimiento que va acompañado de cambios mentales y físico. Este proceso de crecimiento se debe a la multiplicación de células en el organismo y, por ende, un incremento de su tamaño. Esto va a depender de la capacidad del cuerpo para asimilar los nutrientes y convertirlos en energía.
La principal hormona de crecimiento es la somatotropina, la cual acelera el proceso de crecimiento y también puede detenerlo. Así que el cuerpo marca el crecimiento de su organismo y una alteración puede afectar el mismo.
El ejercicio y el crecimiento
Un estudio realizado en los años 70 por investigadores japoneses manifestaron que los ejercicios de carga que realizaban niños podían detener su crecimiento. Dicho estudio se basó en niños que trabajan en fábricas, los cuales cargaban pesos considerables por períodos de tiempo muy largos. Los investigadores detectaron que los niños estaban agotados y presentaban una estatura más baja de lo normal. Sin embargo, la conclusión, era que el principal problema era una mala alimentación.
Pero hoy en día, se ha demostrado que puede ser todo lo contrario. El realizar ejercicio de manera moderada ayuda a desarrollar músculos y huesos, alcanzando la estatura máxima. Ahora bien, el ejecutar un ejercicio extremo e inadecuado que cause lesiones puede influir de forma negativa en el proceso de crecimiento.
Para finalizar, el realizar ejercicio en la niñez puede llevarse a cabo sin problema, siempre y cuando este sea moderado y controlado por un especialista. Además, debe ir acompañado de una alimentación sana y variada que proporcione los nutrientes necesarios para su crecimiento.
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