Las bandas elásticas son sin duda una gran herramienta para el entrenamiento, así como para fisioterapia. Además, su versatilidad, bajo costo y el poco espacio que ocupan llegó a incrementar su interés. Sin embargo, dichas ligas elásticas no están exentas de riesgos, por lo que habría que tener cuidado con ellas.
Producir una lesión
En la mayoría de los casos ocurre cuando no se sujeta firmemente el extremo de la banda y se suelta de golpe puede dañar el ojo u otras partes del cuerpo, causando hematomas superficiales o algo más fuerte.
Pero el incremento del uso de las bandas elásticas ha llevado a estudios más amplios con varios participantes. De hecho, una edición de diciembre de 2020 en The American Journal of Emergency Medicine publicó un estudio de 11 participantes, en los cuales se observó que las bandas de resistencia para ejercitarse podrían causar lesiones oculares. Los traumatismos en el ojo ocasionaban iritis o hipema que fueron de las lesiones más comunes. Algunas otras causaron un daño ocular permanente.
El traumatismo por las bandas elásticas puede causar varias lesiones que pueden resolverse por sí solas como hematomas en la piel, o bien, más graves como sangrado o inflamación dentro del ojo y desprendimiento de la retina.
Consejos para mantenerse a salvo de las bandas de resistencia
A pesar de los riesgos, las bandas de resistencia siguen siendo una opción de ejercicios viable. La clave está en tomar las precauciones de seguridad para minimizar los riesgos de lesiones.
Así que asegura el uso apropiado de este elemento con la inclusión de gafas o anteojos al hacer ejercicio.
No uses accesorios como anillos, reloj, pulseras o pendientes, ya que pueden romper la banda elástica y causar un daño.
Lava la banda de resistencia con agua y jabón para quitar el sudor. Seca con una toalla y después coloca talco. De esta forma, la vida útil se prolongará por más tiempo e impedirá que se rompa fácilmente.
Por ello valora la importancia de proteger los ojos tras un entrenamiento, sobre todo con bandas elásticas para disminuir cualquier riesgo de una lesión.
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