Si experimentas molestias entre los dedos del pie, seguramente se debe al ojo de gallo. Pero ¿acaso sabes qué es y cómo curarlo. De no ser así, convendría saber qué es para tratarlo con remedios naturales para acabar con el problema cuanto antes. ¡Presta atención!
Qué es el ojo de gallo
El ojo de gallo es un tipo de callo sobre un punto óseo. Esta afección se le conoce como el heloma interdigital o heloma Moll. Este tipo de problema resulta molesto y muy doloroso, por lo que es aconsejable que sea tratado por un podólogo profesional.
Las principales causas que generan ojos de gallo es por los zapatos demasiado estrechos o no se ajustan bien a la morfología plantar. En este sentido, esta afección es común que suele tener lugar entre los dedos de los pies, concretamente entre el cuarto y quinto dedo. Los síntomas son coloración amarillenta, forma redondeada, molestias y dolor.
Remedios naturales
Aunque la mejor opción es acudir con un especialista, existen remedios naturales que ayudan a tratarse en casa.
Agua y vinagre de manzana. Para lograr que el ojo de gallo se ablande y sea más fácil quitarlo, tan solo vierte agua fría, hielo, sal y vinagre de manzana en un recipiente. Mezcla hasta homogeneizar y sumerge los pies durante unos segundos.
Cáscaras de limón. Otro remedio natural para acabar con el ojo de gallo, es aplicar cáscaras de limón directamente en la zona afectada. Dejar actuar durante unos minutos y quitar.
Aceite de ricino. Las propiedades antibacterianas del aceite de ricino ayudan a limpiar la piel dañada. Para ello vierte un poco de aceite sobre un algodón y aplica en el ojo del gallo. Deja actuar y quita. Aunque no es necesario eliminar el tratamiento.
Así que no dejes de seguir estos remedios caseros para acabar con el ojo de gallo. Pero no está de más, darles los cuidados necesarios a los pies, utilizar un calzado adecuado y no pasar la mayor parte del día de pie para poder evitar la aparición de este tipo de afecciones.
Imagen: sportlife