A quién no le gusta lucir una piel radiante. Sin embargo, cada piel es diferente y por ello requiere distintos cuidados. Aparte de los productos que nos protegen, es preciso hidratarla desde adentro. Y es que factores externos como el polvo, el sol o el sudor pueden resecar u obstruir los poros, lo que favorece las pequeñas imperfecciones. Es por ello que la alimentación juega un papel fundamental, sobre todo las frutas y los vegetales por su alto contenido en nutrientes, al aportar un beneficio extra a la piel. Y aunque un zumo no sea la solución a los problemas de la piel, una dosis extra de hidratación y nutrientes contribuyen a mantenerla saludable.
Piel seca
Si tienes una piel seca que se cuartea, se siente áspera, pierde luminosidad y en ocasiones se enrojece al grado de descamarse provocando tirantez, entonces la dermis requiere un aporte extra de hidratación. Para ello habría que preparar un zumo de calabaza, kiwi y manzana para hidratar la piel.
Piel grasa
Una textura irregular, brillo en la zona T y con presencia de puntos negros indica que la piel es grasa. Este tipo de dermis presenta un exceso de sebo que provoca la obstrucción de poros y puntos negros. Para ello, lo ideal es un zumo de pepino, jengibre y piña/ananá para equilibrar la piel.
Piel normal
Si la piel tiene firmeza y está libre de imperfecciones con un tono rosa, entonces solo es necesario seguir manteniéndola en perfectas condiciones. Para ella prepara un zumo de calabaza, tomate y zanahoria para un cuidado extra.
Como te podrás dar cuenta, la alimentación es primordial para tener una piel saludable. Así que es una limpieza profunda y los cuidados diarios podrán ayudar a que luzca radiante. Por ello que elige la bebida adecuada y cuéntanos tu experiencia. ¡Cuida la piel desde adentro!
Imagen: tododisca