De las múltiples opciones terapéuticas para el eczema crónico o dermatitis atópica está el baño de lejía. Siendo una práctica repleta de mitos y dudas que vale la pena resolver. Bajo circunstancias específicas, es un hecho que la lejía puede eliminar microorganismos sobre la superficie cutánea que se relacionan con los síntomas de la dermatitis atópica.
Baño de lejía
El eczema también conocido como dermatitis atópica, es una condición crónica de la piel muy común en la población. Desde el punto de vista patológico, se caracteriza por reacciones inflamatorias cutáneas que ocurren como respuesta a estímulos diversos. El contacto con ciertos microorganismos y cambios ambientales son de los principales. El hipoclorito de sodio o lejía cuenta con una actividad bactericida, se trata de una sustancia que podría eliminar algunos microorganismos cutáneos capaces de desencadenar la dermatitis.
Y aunque se trata de un remedio casero, seguro y útil, lo recomendable es probar los tratamientos tradicionales en primera instancia. Para ello habría que acudir con un dermatólogo cuando los síntomas sean intensos y persistentes. El profesional recomendará cremas hidratantes, cambios dietéticos, modificaciones en el estilo de vida, antihistamínicos por vía oral como medida para mantenerse en conjunto con los baños de lejía.
Para los baños de lejía, lo ideal es realizarlos en horas de la noche antes de acostarse. La preparación de esta solución es el punto más importante, ya que existen algunas concentraciones estandarizadas que tienen un buen efecto. En caso de una mala preparación, puede derivarse a fallos terapéuticos, aumento del riesgo de intoxicación e incomodidades. Siguiendo las recomendaciones generales, la manera de preparar el baño de lejía es:
En la bañera vierte 150 l de agua y utiliza ¼ de taza de lejía. La recomendación de concentración recomendada de hipoclorito de sodio es del 6 al 8,25%. La temperatura del agua debe ser tibia, ya que extremadamente fría podría irritar la piel.
Este tipo de remedio solo debe aplicarse hasta máximo de 15 minutos continuos. De hecho, no habría que excederse de 3 baños a la semana. Después lavarse con un poco con agua tibia sin lejía luego del baño y aplicar abundante crema hidratante por toda la superficie.
Ten en cuenta que ningún caso, el baño de lejía debe reemplazar la visita con el profesional de salud. ¡Ve a la segura!
Imagen: fondationeczema