Una de las misiones del método Pilates es que se logra trabajar todo el cuerpo, ayudando a fortalecer la musculatura, aliviar dolores de espalda y mejorar la postura. Pero si a eso se le añade el practicarlo con máquinas, se convierte en uno de los entrenamientos más completos para poder remodelar y estilizar la figura, entre muchas virtudes más.
Entrenamiento completo
Si lo que quieres es entrenar duro, las máquinas de Pilates ayudan a hacer cargas y ángulos que nos abren un panorama único para ejercitarse de nuevas formas. De hecho, la Reformer (máquina de Pilates) puede llegar a hacer más de 80 ejercicios para trabajar zona de caderas, piernas, abdomen y pecho, así como ganar flexibilidad en la espalda.
Trabajar zona pélvica
Son pocas las veces que se habla de la importancia de fortalecer la musculatura del suelo pélvico. Pero el realizar ejercicios específicos en dicha zona ayuda en buena medida. Así que la máquina de Pilates, la silla está pensada para trabajar la zona pélvica y glúteos. Por si fuera poco, también permite ejercitar hombros, dorsales, trapecio y mejora la coordinación.
Estimular cuerpo y mente
Una forma de hacer ejercicio para despertar el cuerpo y las sensaciones es el Yoga. Sin embargo, también existen otras técnicas como el Pilates, ya que trabaja la concentración, lo que a su vez minimiza el estrés.
Mejorar postura
Las máquinas van a ayudar a adoptar una mejor postura y acomodar el cuerpo para evitar forzarlo. La finalidad de esta técnica es la de estirar la columna vertebral y, con ello, fortalecer la musculatura de la espalda que se vincula directamente con la postura.
Los aparatos de Pilates pueden ser determinantes para que el cuerpo obtenga todas las virtudes en poco tiempo, ya que ofrece múltiples posibilidades gracias a su sistema de resortes, agarres, poleas y muelles. Así que prueba esta disciplina con la inclusión de las máquinas y corrobora los resultados.