Como ya es sabido el practicar Yoga es sin duda una disciplina que suele traer muchas virtudes para la salud. Sin embargo, algunas personas suelen ignorar la alimentación. Pero es de vital importancia seguir una dieta saludable para poder obtener los nutrientes necesarios para darlo todo y no morir en el intento.
Los mejores alimentos
Una alimentación deberá contar con un porcentaje considerable de vegetales, frutas, hortalizas, frutos secos y cereales, los cuales incluyen numerosos beneficios para el organismo. Todos ellos son idóneos para quienes practican Yoga, en cambio habría que evitar aquellas comidas picantes, excesivamente calientes, saladas, grasosas y de origen animal.
Comer de forma correcta
Para una óptima digestión, es importante masticar los alimentos para favorecer un bolo alimenticio y que el estómago trabaje correctamente. Asimismo, parte de este proceso aunado a un descanso, una correcta respiración y el ejercicio van a contribuir enormemente a estar saludable. De los aspectos más importantes cuando se realiza el Yoga no es tanto lo que se come, sino cómo se come. El ritmo de vida que se lleva hoy en día dificulta el sentarse a comer una cantidad justa y masticarla unas 25 veces. Pero habría que intentar hacerlo para una salud integral.
La cena también es importante
Aunque el desayuno y la comida son básicos para practicar el Yoga, la cena no deja de ser menos importante. Así que habría que hacer hincapié en no caer en los excesos y comer a una hora muy temprana (a más tardar las 8 o 9 de la noche). Descartando la ingesta de fruta, por el hecho de causar fermentaciones. Lo ideal seria una proteína acompañada de hortalizas, vegetales o algún cereal de bajo índice glucémico.
Un extra para el cuerpo
Los yoguis deberán fortalecer huesos, nervios y músculos, así que para ello es necesario abastecer el organismo con manganeso y potasio. Estos nutrientes nos lo puede ofrecer la remolacha/betabel. El selenio de las crucíferas y los hongos ayudan a combatir los radicales libres gracias a su cantidad significativa de antioxidantes. Otros alimentos que pueden contribuir a la salud son la manzana, las nueces, la quinoa, la menta, la sémola de trigo y las aceitunas negras.
Como verás, el hecho de hacer ejercicio no significa que la dieta se base solo en un alimento. Recuerda que hay un mundo de posibilidades para comer delicioso y, sobre todo, aprender a hacerlo correctamente. Así que en tu próxima sesión de Yoga haz la prueba y siente como el organismo te responde de la misma manera.