El mindfulness, también conocido como ‘atención plena’, es una técnica de meditación que deriva de una práctica de la India de más de 2500 años de antigüedad llamada vipassana. La atención o conciencia plena desarrolla la habilidad de salir de la propia mente y vivir el aquí y ahora. Eso quiere decir que debes mantenerte atento a la respiración, a cada movimiento y situación.
Seguramente en alguna ocasión te has perdido en tus propios pensamientos en vez de interesarte por lo que una amiga te decía, o has tenido problemas de concentración al leer un libro. Esto sucede porque es difícil poner atención con tantos estímulos.
Si pones en práctica este método a lo largo del tiempo tu poder de enfoque y concentración aumentarán, como así también te volverás más empático y acabarás con el estrés. La técnica consiste en estar atento a lo que tu cuerpo está haciendo y desactivar el piloto automático.
Lo más común es meditar utilizando la respiración abdominal, dejando pasar los pensamientos que hacen que pierdas la atención.
En algún momento del día practica la técnica STOP que propone que hagas lo siguiente:
S: suspende lo que estás haciendo durante unos minutos.
T: toma una respiración profunda. Coge aire por la nariz y llena tus pulmones inflando la panza, exhala por nariz contrayendo el estómago.
O: observa con atención tus sensaciones corporales y deja pasar cada pensamiento. Si te distraes simplemente regresa a la meditación.
P: procede con la respiración durante unos minutos.
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Beneficios que ganarás practicando mindfulness
Tendrás una herramienta anti-estrés en todo momento
El mindfulness es una herramienta que estará a tu alcance en cualquier momento y lugar. Cuando te encuentres sobrecargado o estés estresado, con miedo, ansioso y enojado, utilízala. Basta concentrarse en la respiración para sentirse mejor.
Identificarás los patrones de comportamiento
Cuando practicas la meditación mindfulness empiezas a percibir todo con mucha más claridad, identificando los malos hábitos o comportamientos. Cuando reconoces esos patrones, tu percepción del mundo se modifica. Esto significa que muchos de los problemas que consideras que no tienen salida, tendrían una solución si estuvieras más atento.
Apreciarás más el aquí y ahora
Cada día que pasa es único aunque realices las mismas actividades. Nada es 100 por ciento igual y esa percepción transformará tu manera de ver la vida y lidiar con las circunstancias. Ejercitando la atención plena percibirás que cada momento es una nueva oportunidad para hacer algo diferente y no quedarte estancado. Por ello, no hay razón para perder ni un solo minuto repitiendo las mismas actitudes.
Descubrirás que tan solo son pensamientos
Gracias a la conciencia plena descubrirás que todos los enredos que se crean dentro de tu mente son solamente pensamientos, nada es real. Por ejemplo, si tu jefe te llama a la oficina, probablemente pienses que te dará una mala noticia, cuando en realidad puede que esté por darte un aumento, una felicitación u otro cargo. Con la meditación todos los malos pensamientos pasarán de largo sin quedar emocionalmente vulnerable por causa de ellos.
Te volverás más compasivo
Estando en el aquí y ahora aceptarás al otro con todas sus virtudes y defectos. La empatía por el otro nos convierte en personas mucho más pacientes y dispuestas a ayudar.
¿Practicas la meditación mindfulness?
Fuente: San Luis Obispo