Como siempre se ha dicho, el ejercicio es importante en cualquier etapa de la vida. Por lo que en el embarazo no es la excepción, ya que es necesario preparar el cuerpo para el momento del parto. Así que estos ejercicios van a contribuir a la causa. Por ello, ponte ropa deportiva cómoda y asegúrate de tener las herramientas necesarias para realizar la sesión segura. Si pudieses tener un guía que te asesore será lo mejor.
Flexión sobre rodillas
Colócate en posición de cuadrúpedia a la vez que apoyas las manos y las rodillas en el piso. Con el cuello, la espalda y los muslos forma una línea recta. Contrae la espina dorsal para evitar arquear la espalda. Los hombros deben estar por encima de las manos para hacer una flexión de a poco y bajar a la mitad.
Levantamiento de cabeza
Recuéstate hacia un costado con la pierna de abajo doblada de manera ligera. Eleva la cabeza y mantén la otra mano de abajo estirada. Los músculos del abdomen deben estar hacia dentro para encontrar el apoyo.
Semiflexión de piernas
Ponte de pie con las piernas abiertas en paralelo a la altura de la cadera. Flexiona un poco y aprieta las manos con suavidad en los muslos con los dedos apuntando hacia adentro, de modo que los hombros queden relajados. Inhala suavemente a la vez que arqueas la espalda hacia adentro. Exhala y curva la espalda hacia afuera.
Desplantes
Ponte de pie con los pies abiertos y en paralelo a la altura de la cadera. Un paso grande al frente a la vez que aprietas la nalgada de la pierna que se encuentra atrás. Coloca las manos en la espalda y flexiona la pierna que está adelante. Con esta postura realiza 5 respiraciones.
Recuerda que antes de realizar esta rutina de pilates en la etapa del embarazo, es importante acudir con el especialista para que realice una valoración previa para que saber si puedes o no llevarla a cabo, según tus antecedentes clínicos.