No cabe duda que la bicicleta es un excelente medio de transporte que permite disfrutar del paisaje a la vez que provee salud. Además, se ha logrado postular en los primeros lugares a favor de la naturaleza al no generar contaminación, siendo de los sistemas públicos que se multiplican a gran velocidad. Es por ello que si has decidido empezar a utilizar la bici, habría que seguir ciertos pasos para sacarle provecho y mejorar tu calidad de vida.
Paso : Cómo elegir la bicicleta
En el mercado actual existe gran variedad de bicicletas, sin embargo conviene hacer una reflexión importante antes de la compra e informarse lo suficiente. Lo primero es pensar si la bici va a servir con un fin deportivo, o bien, para un fin utilitario. En el caso de ser para la primera opción, se tendría que elegir componentes que puedan proporcionar libertad al realizar el ejercicio y considerar los componentes o partes específicas. Y aunque en muchas ocasiones las personas experimentan cierta incomodidad al andar en bici, habría que considerar los siguientes factores como:
Tamaño de la bicicleta. Así como en la ropa, la bicicleta viene por tallas. Y aunque pareciera algo absurdo, es fácil encontrar personas que intentan pedalear bicicletas que les quedan grandes o pequeñas. Por ello, hoy en día los fabricantes usan un sistema de talla similar al de la ropa (S, M, L, XL). Así que la talla correcta es básica y en ella se podrán hacer ajustes para afinar postura como subir o bajar, desplazar el sillín y cambiar la potencia, según nuestra anatomía.
Puntos de apoyo. Existen tres puntos de apoyo en donde podemos disfrutar de la bicicleta y son el sillín, los pedales y el manillar. Estos son los puntos en el que nuestro cuerpo entra en contacto con la bicicleta y es importante que estén regulados para que no estemos encogidos o estirados.
Paso 2: Para qué la necesitamos
Una bicicleta que sirve para llevarnos al trabajo, tendría que ser cómoda, fiable y disponer de complementos para la vida cotidiana. Además, deberá contar con un buen juego de luces y portaequipajes para que permita cargar con bolsas y proteger la ropa.
Paso 3: Mantenimiento
El mantenimiento básico de la bici puede ayudar a ahorrarnos tiempo, dinero y esfuerzo. Así que el realizar esos pequeños ajustes hará la diferencia. Recuerda que hay gente especializada que puede ayudarte.
Así que ahora solo basta con elegir la bicicleta correcta para que puedas ejercitarte, o bien, ir al trabajo o la escuela. Ten en cuenta que el mantenerte pedaleando de manera constante ayuda a mejorar el estado en general, combate el sobrepeso, ayuda a liberarte del estrés y resulta benéfico en el control del colesterol y la hipertensión ¿Qué más se puede pedir?