Existen remedios, mascarillas y otras alternativas para tener una piel sana. Sin embargo, hay una combinación infalible para mantener una dermis fresca, suave, elástica y protegida, por lo que el pomelo/toronja y el mamey salen a relucir en esta gran labor. He aquí todo lo que aportan estas grandes frutas.
Frutas para la piel
El pomelo es una fruta que ayuda a combatir las manchas y los daños ocasionados por la exposición al sol y los radicales libres, debido a su alta concentración de antioxidantes y nutrientes como la vitamina C y E. Asimismo, ayuda a minimizar las arrugas y las líneas de expresión, dando una apariencia rejuvenecida y fresca.
El mamey es una fruta tropical cuyas semillas se han usado para máscara de pestañas, ya que contiene aceites que ayudan a estimular el crecimiento del cabello y retiene la humedad. Además, cuenta con vitamina B, C y E que estimulan las fibras del colágeno que resguarda las pestañas y les aporta fuerza, protege los folículos capilares de bacterias y mejora el flujo sanguíneo.
Mascarillas
Mascarilla de mamey. Para ello, ralla la semilla del mamey. Mezcla 1 cucharadita de zumo de limón y 1 cucharada de ralladura de semilla de mamey. Aplica en el rostro, sobre todo en los granos y las espinillas. Deja actuar durante 30 minutos. Enjuaga con agua tibia y repite el proceso hasta obtener los resultados deseados. También puedes aplicar aceite de mamey en las pestañas (lo ideal es colocar por las noches en las pestañas limpias, libres de maquillaje).
Mascarilla de pomelo. Para ello, obtén el zumo de un pomelo. Vierte en un recipiente el zumo de pomelo, ½ taza de avena, ½ taza de yogur natural y 2 cucharadas de miel hasta homogeneizar. Aplica sobre el rostro limpio, con movimientos suaves. Deja actuar durante 20 minutos y retira con agua tibia. Al final, agrega una crema hidratante.
Así que estos ingredientes serán de gran ayuda para tu rutina de belleza, por lo que no deben faltar. Puedes altenar su uso, o bien, aplicar uno enseguida del otro. Pero no dejes de mimar tu piel.