Desde hace tiempo nos preguntamos si la contaminación del aire puede llegar a incidir de forma negativa en el cabello. Pero para no darle más vueltas al asunto, he aquí lo que señala una investigación presentada en el 28 Congreso Europeo de Dermatología y Venereología en Madrid, sobre si la exposición de contaminantes atmosféricos está relacionado con la caída de cabello en personas.
De qué se trata
En la investigación se trató de exponer a las células del cuero cabelludo humano en la base de los folículos pilosos a varias concentraciones de PM10 como polvo o diésel. Al cabo de 24 horas, los investigadores realizaron un proceso científico conocido como Western Blot para detectar niveles de proteínas en las células. El resultado mostró que la presencia de PM10 y de partículas de diésel minimizaron los niveles de β-catenina, proteína responsable del crecimiento del cabello y la morfogénesis.
Incluso el estudio reveló que los niveles de otras proteínas que son las responsables del crecimiento y la retención del pelo, se redujo. Esto quiere decir que cuanto mayor sea el nivel de contaminante, mayor es la disminución de proteínas.
El Centro de Investigación de Toxicología Industrial, en Lucknow publicó un estudio, en el cual comprueba la pérdida de cabello debido a la contaminación y puede llegar a coexistir e incluso imitar la alopecia androgenética con un patrón de pérdida de cabello difusa no modelada. Es más, puede agravarse e incidir en la aparición de alopecia cicatricial, alopecia areata difusa o efluvio telogénico crónico.
En conclusión, la caída del cabello causada por la contaminación se vincula con las nano partículas suspendidas en el aire, así como con los hidrocarburos aromáticos polocíclicos. Ambos causando daño en el pelo al inducir el estrés oxidativo en los folículos. Sin embargo, un excelente protector en la fibra capilar del cabello, es el ácido hialurónico, el cual actúa como barrera mecánica contra la agresión de los contaminantes.
Imagen: institutomedicoricartmadrid