Cuando empiezas tu carrera y lo das todo, puede que al poco tiempo sientas dolor en las espinillas. La mayor parte de las veces se prolonga durante días y es más complicado seguir con el entrenamiento. Esto puede ser una señal de un síndrome medial de la tibia, mejor conocido como dolor de espinillas. El dolor suele darse durante semanas y en los casos más severos puede hacer imposible continuar con tu sesión de running. Sin embargo, hay ejercicios que ayudan a tratar el dolor en la tibia y prevenir que vuelvas a padecerlo.
Rodamiento de pelota
Este movimiento minimiza la tensión de los músculos de los pies para aliviar el dolor en la tibia. Para ello levanta el talón y deja la parte delantera del pie sobre la pelota en una posición relajada. Intenta estirar las articulaciones de manera lenta a medida que vas rodando la pelota de izquierda a derecha, iniciando con el pulgar.
Elevación del talón y los dedos
El estirar y fortalecer los músculos de las espinillas va a ayudar a prevenir dolores y no tendrás que saltarte los entrenamientos. Apóyate en los talones y eleva los dedos de los pies hacia arriba. Flexiona las rodillas y comienza a balancearlas hacia adelante. Haz la transición lenta del talón a la punta.
Estiramiento de pie y pierna
El tener los músculos de los pies y las espinillas fuertes ayuda a minimizar el riesgo de una lesión. Asimismo, ayuda a correr más y que las distancias sean más largas sin tener dolor en la tibia. Para ello coloca una banda de resistencia alrededor del pie y empuja el tobillo hacia abajo lo más que puedas. Asegúrate de estirar el pie e intenta hacerlo con toda la energía que puedas.
Ten en cuenta que debes actuar rápido cuando empieces a notar el dolor. Si ignoras el problema puede limitarte e impedir correr durante varios meses. Dale tiempo al cuerpo para aumentar el rendimiento y realiza un plan de entrenamiento que se adapte a tus necesidades.
Imagen: mejorconsalud