Casi siempre se piensa que el sobrepeso se debe a una dieta mala y la falta de actividad física. Y aunque tiene mucho que ver, el comer en exceso no es el verdadero problema, sino que gran parte de las dietas de adelgazamiento llegan a fracasar por el estado emocional, ya que el hambre llega a confundirse con la tensión, la rabia, la frustración, la ansiedad o el estrés. Así que es importante aprender a canalizar las emociones a través de la terapia de tapping también conocida como Técnicas de Liberación Emocional (EFT).
En qué consiste el tapping
El tapping fue creado por el psicólogo estadounidense Roger Callaham, siendo un método muy sencillo de digitopuntura que ayuda a controlar los atracones de comida para bajar de peso y, con ello, acabar con esos malos hábitos que se asocian con alguna carencia afectiva como tristeza, rechazo o soledad.
Se basa en la acupuntura tradicional, solo que en este caso las agujas se sustituyen por los dedos, los cuales dan ligeros golpes en puntos estratégicos en el cuerpo (mentón, cabeza, ceja, clavícula, brazo) con el fin de conectar la emoción que se está sintiendo en ese preciso momento. La técnica es muy fácil de autoaplicar y su efecto es relajante y muy liberador, ayudando al cerebro a descender los niveles de cortisol (hormona del estrés).
La técnica fue pensada para solucionar cualquier problema de un desequilibrio energético, ya sea por ansiedad, fobias, miedos y rupturas sentimentales, etcétera. Pero no solo se emplea para las emociones. Las últimas aplicaciones son en el ámbito de la salud, específicamente en las alergias, ya que hacen reaccionar al sistema inmune ante sustancias inocuas como el polen.
Recuerda que las emociones y el estrés nos impiden escuchar a nuestro cuerpo como se merece. Así que date la oportunidad de conocer el tapping y seguramente tendrás una herramienta autoaplicable para que puedas liberarte de todo y mantener un organismo saludable.