La capacidad de absorber vitamina B12 se reduce con el paso del tiempo, sin embargo, el 4 % de mujeres de entre los 40 y 60 años sufre de deficiencias de este nutriente. Así que es importante reconocer las señales o signos que podrían indicar la falta de la vitamina B12, ya que es fundamental para el metabolismo de proteína y la formación de glóbulos rojos en la sangre y el buen mantenimiento del sistema nervioso central.
Palidez
La deficiencia de vitamina B12 causa la falta de glóbulos rojos, lo que a su vez provoca palidez. Asimismo, al no tener un porcentaje considerable de glóbulos rojos, también puede darle a la piel un tinte amarillo, ya que hay una producción excesiva de bilirrubina (sustancia ligeramente roja o color marrón que la produce el hígado cuando se descomponen los glóbulos rojos).
Mareo
La falta de vitamina B12 puede llegar a causar la pérdida del equilibrio, falta de aliento y un poco de marreo, sobre todo cuando hay un esfuerzo mayor. Esto se debe a que el cuerpo carece de los glóbulos rojos que requiere para obtener oxigeno para las células del organismo.
Dificultad para respirar
De los signos más sobresalientes tras la deficiencia de vitamina B12 es la dificultad para respirar. Siendo la misma que contribuye a la producción de la secreción de hemoglobina, proteína que se encarga de transportar oxigeno al torrente sanguíneo. Esto puede causar menos flujo de oxígeno a los tejidos, generando anemia y debilidad.
Fatiga
Si la fatiga es persiste por varios días, es probable que el organismo requiera vitamina B12. Investigaciones de la Academy of Nutrition and Dietetics señalan que aquellos que están agotados y sin energía, aunque este bien descansados, precisan aumentar las reservas de dicho nutriente.
Problema de memoria
Muchas personas que tienen deficiencia de vitamina B12 tienden a presentar demencia, sobre todo si son mayores de edad. Pero por fortuna, un suplemento alimenticio vitamínico puede ser de gran ayuda para volver agilizar la memoria.
Si presentas ciertos síntomas, puedes comenzar por hacerte un examen de sangre y acudir con tu médico para saber cómo combatir esa deficiencia cuanto antes, según tus antecedentes. Así que siempre debes estar atento a lo que tu cuerpo te dice.