Correr de manera regular ayuda a mejorar la salud. Sin embargo, como todo deporte puede haber el riesgo a sufrir una lesión, lo que podría hacernos pasar una mala jugada. Así que si te has lesionado, es importante armarse de paciencia para poder recuperarse antes de tiempo y retomar la actividad física. Por lo que a continuación te muestro un par de consejos para que te ayuden en el proceso.
1. Elige el momento preciso
Antes que nada, habría que decidir cuando es el mejor momento para retomar el entrenamiento. Así que fíjate esta meta a plazos largos para que puedas reiniciar los entrenamientos cuando te sientas bien recuperado de la salud y el rendimiento. Además, el tiempo de espera va a depender de la gravedad de la lesión.
2. Fíjate metas a largo plazo
Cuando sientas que ya es el momento de volver a correr, sigue un plan de entrenamiento bien estructurado para que seas consciente de lo que puedes hacer. Además, déjate guiar por un equipo de expertos (médico, fisioterapeuta, nutricionista, etcétera) para que sigas las encomiendas.
3. Adáptate al entrenamiento
Ten en cuenta que el incrementar el nivel e intensidad debe ser de poco para evitar recaídas. Así que ve adaptándote a tu entrenamiento y hazlo con determinación y dedicación para recuperarte del todo.
4. Aprende de las lesiones
Muchos corredores se lesionan debido a un desequilibrio en la estática corporal o por falta de entrenamiento. Así que los entrenamientos funcionales pueden ayudarte a trabajar el cuerpo de manera específica. Así que cada dolor que sientas es una señal de alerta que deberías considerar para saber la causa.
5. Date el tiempo necesario
La recuperación debe formar parte de tu plan de entrenamiento. Por lo tanto, la fase de calentamiento es igual de importante que la fase de recuperación. Así que las sesiones de Yoga, los masajes, los estiramientos y el sauna pueden acelerar la recuperación. Deja el tiempo necesario para que tu cuerpo se relaje y tengas buenos resultados con el fin de minimizar el riesgo a una lesión.
Así que no desesperes más y sigue estos consejos. Recuerda que es necesario aprender a escuchar nuestro cuerpo para mantenerlo sano.