Puede que incluyas los carbohidratos en tu dieta, o bien, que los elimines por completo de tu alimentación. Pero debes tener en cuenta que un par de gramos de carbohidratos en tu plato es importante, tanto en la calidad como en la cantidad para lograr tener una salud adecuada. Sin embargo, desde los años 90 las personas están tomando una tendencia de consumir menos carbohidratos. Pero a pesar de comer menos macronutrientes y tener algunos cambios positivos en el equilibro de nutrientes, estamos optando por carbohidratos de baja calidad. El resultado final es que todavía nos estamos quedando cortos en alimentar nuestro cuerpo de manera correcta con los hidratos correctos.
No estan balanceados los macros
Presta atención a cualquier dieta que quiere eliminar grasas, carbohidratos o grasas. Todos los días es necesario ingerir una cantidad considerable de vitaminas, minerales, antioxidantes y fibra que se encuentran en estos macronutrientes. Lo mejor es equilibrar estos macros apuntando a una dieta que cuente con 50% hidratos, 30% proteína y 20 % grasas.
Subestimar el poder de los hidratos
Los carbohidratos complejos aportan la fibra dietética necesaria para mejorar la salud digestiva, prevenir enfermedades crónicas y frenar los antojos. Pero el no tener suficiente fibra puede provocar problemas de salud significativos como niveles de colesterol poco aceptables o diverticulosis, lo que pone en riesgo la salud digestiva y las enfermedades cardiacas.
Eliminar carbohidratos para adelgazar
Las dietas bajas en carbohidratos pueden engañarte y hacerte pensar que al eliminar este nutriente es una solución rápida para adelgazar. Sin embargo, cuando los omites también cortas alimentos ricos en fibra. De hecho, una investigación señala que el alto contenido de fibra en los carbohidratos complejos puede contribuir al éxito de una pérdida de peso. Así que lo ideal es obtener más fibra de los complejos, incluyendo frutas, verduras y granos enteros ricos en fibra para promover la pérdida de peso y conducir a resultados sostenibles.
Así que recuerda que deberás elegir carbohidratos inteligentes que son ricos en nutrientes y que no sean extremadamente refinados, procesados o con ingredientes artificiales. Además, deberías enfocarte en la densidad de nutrientes en lugar de elegir aquellos alimentos con una cantidad baja de carbohidratos.