Las piernas tienen la función de llevarnos a todos lados sin parar, por lo que al final se sobrecargan. Así que lo que uno desea es liberarse de las piernas hinchadas y cansadas para poder descansar como se debe y, con ello, recargar energías para el siguiente día. Es por ello que el Yoga puede ayudar enormemente, ya que existen ciertas posturas revitalizantes para calmar y oxigenar las piernas y los pies cansados.
Postura de la guirnalda
Esta postura es excelente para favorecer una intensa apertura de las caderas. Separa las piernas un poco más ancho de las caderas y gira ligeramente los pies hacia fuera. Flexiona las rodillas y baja de a poco hasta quedar en cuclillas. Separa las rodillas con los talones colocados en el suelo. Pon las manos en el centro del pecho y con los codos presiona las rodillas, abriendo la cadera y expandiendo el tórax. Aleja los hombros de los oídos y alarga la columna. Respira profundamente.
Postura luna creciente
Esta postura regula el sistema digestivo a la vez que fortalece los tobillos y las piernas. Arrodíllate con la pierna izquierda adelantada. Descansa las manos sobre las rodillas, relaja los hombros y los brazos. Inclina el tronco hacia adelante, estira la parte trasera de la pierna derecha y apóyate en la pierna doblada. La planta del pie debe estar contra el suelo. Estira los brazos detrás de la cabeza, arquea la espalda, mirando hacia arriba. Incrementa la flexión de la columna con cada espiración. Suelta de a poco y repite la asana cambiando de pierna.
Postura de ojo de la aguja
Esta postura alivia la rigidez de las caderas e incrementa el rango de movimiento en la parte inferior del cuerpo. Recuéstate boca arriba con las rodillas flexionadas y los pies tocando el suelo. Flexiona la rodilla y cruza el tobillo derecho sobre el muslo izquierdo, manteniendo el pie derecho flexionado. Levanta las piernas al pecho, tomando el muslo izquierdo con ambas manos. Deja que la espalda y la cabeza caigan hacia atrás y estira la rodilla derecha, alejándola del cuerpo. Haz varias respiraciones profundas.
Quizás, al principio te cueste trabajo realizar estas posturas de Yoga, pero conconstancia lo lograrás y tus piernas te lo agradecerán. Así que coloca la esterilla, dale play a la música y empieza cuanto antes.