La manteca karité es un producto natural elaborado de las nueces que produce el árbol del mismo nombre, el cual crece al oeste y parte central de África. Cuenta con varias propiedades benéficas que se pueden aprovechar al máximo. Durante siglos se ha valorado por sus capacidades hidratantes que puede aplicarse en el cuerpo como un remedio de belleza.
Origen
La manteca de karité se obtiene de manera artesanal, por medio de una practica que se le considera como todo un ritual y cuyo conocimiento va de generación en generación. Primero se recolectan los frutos, se secan las nueces, se tuestan y se muelen. Después de este proceso, se obtiene un líquido de tono oscuro que se bate a mano varias veces. Se desecha el líquido hasta obtener una pasta homogénea, suave y compacta de color marfil.
Beneficios
La manteca de karité que se obtiene a partir de los frutos esconde grandes secretos de belleza que valdría la pena conocer.
Bálsamo labial: el ácido cinámico de este producto protege los labios contra los elementos externos. Está indicada para ayudar a reparar, calmar y regenerar los tejidos debido a la vitamina A, D, E y F. Para hacer un bálsamo labial tan solo derrite la manteca de karité, cera de abejas y aceite dulce de almendras. Mezcla los ingredientes e incorpora el aceite de una cápsula de vitamina E. Ahora solo resta darle el sabor, al verter 1 o 2 gotas de aceite esencial de naranja o menta. Mezcla y deja que tome consistencia alrededor de 3 horas a temperatura ambiente.
Hidratante de manos: su alto poder de hidratación la convierte en una gran alternativa para cuidar las manos. Las repara y las nutre, dándole suavidad y acabando con la resequedad. También resulta excelente para aplicar en codos, talones y rodillas.
Protector corporal: Debido a su poder emoliente e hidratante, calma la piel y acaba con la sequedad. El contenido de vitamina F ayuda a incrementar la elasticidad de la piel. Asimismo, puede prevenir la aparición de estrías durante el embarazo y su poder antiinflamatorio permite suavizar la rojez de las quemaduras y calmar las molestias.
Vitalidad de cabello: la manteca karité hidrata el cabello a profundidad y protege de las agresiones solares. Puedes usarla como champú o mascarilla y dejar reposar durante 20 minutos. Su aplicación ayuda a recuperar el volumen, la suavidad y el brillo.
Así que cuando veas este producto, no dudes es utilizarlo y corroborar sus beneficios. Ahora que si ya sabes de él, no dudes en darnos un par de consejos de belleza.