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El aceite de orujo es uno de los más conocidos debido a su uso tan común. Sin embargo, bastaría con preguntarse de dónde proviene y cuáles son sus beneficios para poder considerarlo. Así que sin más preámbulo, vayamos a conocer más a fondo sobre este producto.
Qué es el aceite de orujo
El aceite de orujo es un compuesto derivado del aceite de oliva. Este proviene de la oliva, pero ha sido sometido a varios procesos químicos para su producción. Es un aceite de menor calidad que el aceite de oliva extra virgen y con mayor acidez. Dependiendo de las cualidades y la calidad, se puede dividir en aceite de orujo de oliva, aceite de orujo refinado y aceite de orujo bruto.
Beneficios
Su composición es rica en ácido oleico y compuestos bioactivos exclusivos como el beta-sitosterol o el escualeno, el cual aporta propiedades que tiene un efecto protector tanto del propio aceite que lo hace más duradero y estable, como de la salud con efectos benéficos para el organismo.
El aceite de orujo tiene el mismo perfil lipídico que el aceite de oliva, ya que contiene la misma cantidad de monoglicéricos, saturados e insaturados. En este sentido, contiene ácidos monoinsaturados oleico, los cuales minimizan el riesgo de sufrir enfermedades cardiovasculares, al ser los responsables de reducir los niveles de colesterol malo y colesterol plasmático total.
Investigaciones del Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC) señalan que el ácido maslínico o crataególico que se encuentra en la cera de la piel de las aceitunas (sobre todo en el orujo graso o seco) es una defensa natural contra el cáncer de colon y puede ralentizar hasta un 80% la propagación del virus del sida en un organismo afectado. Incluso los compuestos activos de aceite de orujo podrían tener un efecto protector frente a la enfermedad del Alzheimer.
Por otro lado, el aceite de orujo contiene numerosos antioxidantes naturales como el tocoferol (vitamina E), carotenos, fitoesteroles, y clorofila, Compuestos que ayudan a prevenir el cáncer, enfermedades cardiovasculares y el envejecimiento, entre otros. El aceite de orujo contiene más fitoesteroles que el aceite de oliva, ya que estos se encuentran principalmente en el hueso de la aceituna.
Recomendaciones
El aceite de orujo por su composición es excelente para guisar y freír. Pero para realizar frituras con este aceite, es importante no mezclarlo con otros, ya que si se mezclan los aceites, puede que la comida adquiera un sabor desagradable al no compartir el mismo nivel de acidez.
El aceite de orujo al calentarse provoca que los ácidos grasos se saturen y, por ende, se pierden más propiedades benéficas. Para ello se recomienda sólo comer frituras ocasionales.
Por tanto, el aceite el orujo puede convertirse en una alternativa debido a sus propiedades y costos. Así que vale la pena darnos a la tarea de probar este producto para poder cerciorarse por uno mismo.