Cuando recién tenemos nuestros propósitos y dentro de ellos está el de seguir hábitos positivos para estar saludables, la mayoría de personas recurren a excusas absurdas que impiden llevarlos a cabo y ponen en jaque su bienestar. Dentro de ellos están comer mejor, dormir a tiempo, evitar fumar y realizar ejercicio constantemente. Así que habría que empezar a trabajar en uno mismo para darle la mejor cara a nuestra salud.
Yo no nací para el gimnasio
Es normal que a ciertas personas no les gusta el gimnasio. Pero el hecho de que no les guste, no quiere decir que no puedan salir a correr, realizar senderismo, adentrarse al Yoga o Pilates o simplemente equipar la casa con máquinas y herramientas para que se practique de manera cómoda.
No tengo dinero
No es necesario pagar una costosa membresía para incrementar tu actividad diaria o comprarse las mejores prendas deportivas. Ni tampoco requieres dinero para hacer ciertos ejercicios (flexiones, sentadillas o saltos, etcétera) en tu propia casa, ni mucho menos necesitas un par de monedas para sacar a pasear a tu mascota. Tan solo precisas de motivación para empezar el día lleno de energía y realizar la actividad física que más te guste.
Ya estoy mayor
Otra excusa para no realizar una actividad física, es el decir “ya estoy mayor que apenas si puedo caminar". Pero el llevar a cabo un estilo de vida activa no es cuestión de edad, sino de actitud y ambición por querer vivir más años en mejores condiciones.
De algo me he de morir
Hay personas que no están dispuestas a salir de su zona de confort, por lo que prefieren tener malos hábitos y vivir con enfermedades y barreras que uno mismo se pone. Pero todo ello es una manera de vivir en el conformismo. Así que es momento de fajarte los pantalones y darlo todo para cambiar una vez por todas.
No tengo tiempo
Una de las excusas más comunes es la de no tener el tiempo suficiente para ejercitarse. Sin embargo, el dedicarle de 30 a 60 minutos al ejercicio va de maravilla. Así que habría que gestionar bien el tiempo y elegir las prioridades para evitar cualquier pretexto.
Seguramente que para cada pretexto tendrás una razón de peso que te respalda. Así que es momento de liberarte de todo eso y dejar de vivir en el conformismo para estar sano ¿Cuál es tu excusa?
Imagen: vix