Los hábitos son comportamientos en los que nos inmiscuimos de manera rutinaria en repetidas ocasiones. Así que si somos eficientes en la realización de tareas complicadas, es porque las aprendimos y las comprendemos de forma que se ejecutan sin pensar. Pero algunos de ellos pueden salirse de las manos y acaban por convertirse en malos hábitos que se arraigan a nuestro sistema. Por lo que habría que saber cómo quitarlos del paso.
Pasos para acabar con los malos hábitos
Un hábito de ruptura implica un enfoque distinto. He aquí los pasos para romper con los malos hábitos.
Decídete al cambio. Lo más importante es romper con el mal hábito y desprenderse de esa mala costumbre. Así que cuando uno piensa en aquellas desventajas que trae consigo ese hábito, es más fácil tomar la decisión de dejarlo y ponerse a pensar en los beneficios que vendrán después.
Se consciente de cada detalle que se relacione con los malos hábitos. Para poder detener un mal hábito hay que ser consciente de que solo uno es capaz de eliminarlo. Incluso es primordial entender qué es y cómo funciona ese hábito que se desea quitar. Un punto fundamental es saber cuáles son los desencadenantes que lo provocan.
Crea estrategias para ayudar a detener el hábito. Con toda la información recopilada, ahora puedes estar atento y saber en qué momento eres más propenso a seguir ese mal hábito antes de que suceda. Es el momento de diseñar una estrategia para frenar ese comportamiento. Así que cuando te encuentras haciendo un mal hábito, deja de hacerlo de inmediato.
Reemplaza el hábito con una alternativa. Cuando un hábito implica el uso de una parte del cuerpo, es muy fácil tratar de ocuparla con una actividad para que sea incompatible con el mal hábito. Así que reemplaza el hábito con una alternativa. Y aunque aquello implique hacer algo molesto o poco agradable, es un paso importante para eliminar la mala costumbre.
Se constante y haz el seguimiento del progreso. La persistencia y la constancia son claves para romper el mal hábito. Si trabajas duro toda la semana, pero luego aflojas los fines de semana, no podrás erradicar el mal hábito. En algún momento podrás sentir que no puedes conseguirlo, ya que es demasiado para ti. Sin embargo, es importante establecer un sistema de recompensas para poder reforzarte y motivarte y, con ello, lograr el objetivo.
Recuerda que cuanto más lo intentes, mejores probabilidades tendrás desaparecer ese mal hábito. Así que no olvides repasar estos pasos para tener un estilo de vida mejor. Verás que cuando logres eliminar esas malas costumbres de tu vida, te sentirás mucho mejor ¿Y tu, a qué mal hábito le has puesto fin?
Imagen: elcomercio