Existen muchos mitos respecto al ejercicio. Sin embargo, aquel que sobresale es, si el ejercicio después de comer ayuda a bajar de peso. No es raro que después de una comida copiosa uno tenga necesidad de ejercitarse rápidamente para minimizar la sensación de saciedad, pero ¿acaso es saludable? Así que para saber la respuesta sigue leyendo.
Entrenar después de comer
Durante la digestión nuestro organismo envía más sangre al estómago para que el sistema digestivo pueda procesar todo el alimento, y, con ello, lo convierta en nutrientes esenciales para el cuerpo. Pero si comenzamos a hacer ejercicio, la sangre abandonará dicha zona y se desplazará a los músculos, ya que es en ese lugar donde se requiere justo en ese momento. Sin embargo, esto puede provocar mareos, desmayos e incluso corta la digestión.
Por eso, lo que se recomienda es esperar unas horas después de comer para hacer ejercicio. Esto hará que el cuerpo pueda metabolizar completamente para obtener más energía para trabajar. Ahora bien, si ha sido una comida normal, con 2 horas bastará. Pero si es una comida copiosa, lo ideal es que esperar al menos 4 horas.
Si no tienes horas libres en el día y en el único momento en que puedes ejercitarte es después de comer, lo aconsejable es hacer una pequeña comida unos 3/4 de hora antes de ejecutar los ejercicios de baja intensidad.
Con ello, queda despejada la duda de que el hacer deporte justo después de comer te ayudará a perder grasa y quemar calorías. Lo ideal es dejar que el cuerpo termine de hacer digestión para aprovechar el entrenamiento y, con ello, poder obtener el objetivo deseado. Recuerda que la alimentación es básica, siempre y cuando esta sea equilibrada y saludable. Así que también es un punto a considerar para mantener una figura adecuada ¿Y tú, entrenas después o antes de comer?