Por más que te has empeñado en ejercitarte, resulta que al final tienes un agotamiento extremo al llevar a cabo alguna actividad física, aunque esta sea de bajo impacto como dolor de cabeza, nauseas y mareos, entre otras más. Así que quizás podrías tener alergia al ejercicio y no te has percatado. Veamos de qué se trata.
Qué es la alergia al ejercicio
Este trastorno se le conoce como anafilaxia inducida por ejercicio, el cual tiene una incidencia del 2% de la población y suele afectar a adultos, adolescentes, mujeres y hombres de hasta alrededor de los 40 años. La anafilaxia se puede denominar como reacción alérgica grave que puede afectar a dos órganos o más, al grado de provocar la muerte, de acuerdo con la Biblioteca Nacional de Medicina de los Estados Unidos.
La anafilaxia se debe a una liberación de varias sustancias por parte de basófilos y mastocitos. Dichas células pueden activar mecanismos inmunológicos o no inmunológicos. Así que quienes padecen anafilaxia inducida por el ejercicio, se ven afectados por síntomas al momento en que inicia cualquier actividad física. Asimismo, dicho trastorno tiene un desencadenante, los alimentos.
Varios estudios han comprobado que antes de hacer ejercicio, las personas ingieren alimento y eso hace que desate la alergia por ejercicio. Aunque en otros pacientes sucede lo contrario.
Síntomas de la alergia por ejercicio
- Digestivas. Dolor abdominal como un cólico, nauseas y diarrea.
- Hemodinámicas. Síncope o desmayo, pérdida de la conciencia e hipotensión.
- Cutáneas. Calor, piel roja, hinchazón, urticaria generalizada y prurito.
- Respiratorias. Pecho apretado, obstrucción vía aérea alta y sensación de falta de aire.
Tratamiento
Si presentas alguno de estos síntomas, debes suspender de inmediato la actividad física. Ahora bien, si las reacciones en la piel no desaparecen en un lapso de 10 minutos, habría que consultar con un médico alergólogo cuanto antes.
Recuerda que nuestro cuerpo nos dice cuando algo no va bien, por lo que habría que prestarle atención y no ignorarlo ¡Cuidemos la salud!