El pecho es una parte delicada de la mujer, por lo que habría que considerarlo al realizar ejercicio. Así que si ya empezaste a mantenerme activa, es mejor ir a la segura con estos consejos para un óptimo rendimiento sin dañar tus pechos ¡Ante todo seguridad!
Consejos
El pecho de una mujer es un músculo, pero también tiene tejido glandular y grasa. Por este motivo, el tamaño y la forma del pecho femenino es distinto al del hombre, al igual que sus funciones. Así que los deportes que implican impacto como el boxeo o las artes marciales, suponen un riesgo considerable de lesión. Es que una patada o un golpe en seco en un pecho puede suponer una lesión. Si bien, es cierto que en el mercado existen petos o artículos que dan protección adicional, evitando los efectos de los impactos que se vinculan con el deporte. De igual forma, la mejor protección es una buena técnica por lo que habría que seguir las indicaciones de entrenadores al pie de la letra.
Pero no solo los deportes de impacto implican probables lesiones, sino que el hecho de correr puede ser una actividad que tras diversos estudios han constatado que si se realiza sin una adecuada sujeción del pecho puede traer problemas como los ligamentos de Cooper, que son los que se encargan de la sujeción de las mamas.
Y es que al correr supone movimientos en el que las mujeres pueden tener no solo incomodidad sino dolor en el pecho. Por ello es importante llevar un sujetador adaptado al tamaño de los pechos y elementos de protección adecuados como las almohadillas. Así que los tops con sujeción o sujetadores deportivos ayudan a minimizar sustancialmente las molestias o el dolor ocasionado por el movimiento del pecho.
Es por ello que habría que elegir el modelo y la talla adecuada para sentirse cómoda. El pecho debe quedar bien recogido dentro de la copa sin que sobresalga y el contorno no debe apretar. Una de las recomendaciones más repetidas, es el de mantenerlo bien en la medida de lo posible y renovarlo cuando sea necesario.
Así que es importante conocer el deporte a realizar, para saber cuál es el sujetador indicado con el fin de evitar riesgos a lesionarse.