La anosmia (perdida total del olfato) y la ageusia (perdida total del gusto), suelen presentarse con mayor incidencia en estos últimos tiempos. Y aunque existen muchos tipos de tratamientos para ello, dependiendo la causa. Los casos más comunes son tratados con antibióticos, terapias o ejercicios. Sin embargo, se han demostrado mejores resultados al reeducar el olfato y el gusto. Es por ello que a continuación te mostramos un par de consejos para poder empezar a reconocer los olores y los sabores.
Consejos
Incrementar el condimento de los alimentos. Lo ideal sería condimentar los alimentos con especias y hierbas aromáticas (menta, orégano, tomillo, hinojo, albahaca, romero y laurel), ya que resultan potenciadores del sabor, lo que podría contribuir a la estimulación de los sentidos.
Optar por alimentos líquidos o ricos en zumos. Estos alimentos favorecen la disolución de los sabores y la entrada de estos a las papilas gustativas.
Tener un set de olores. Para una estimulación olfativa óptima, habría que tener un set de olores comunes (limón, rosa, clavo y eucalipto) y comenzar a olerlos en diferentes concentraciones para rememorar un olor y recuperarlo. Además, habría que evitar aromas excesivamente intensos que podría causar irritación.
Elegir alimentos templados o calientes. Estudios señalan que los alimentos con sabor dulce, amargo o umami, podrían verse potenciados si se consumen calientes. Esto debido a una reacción mayor en los canales TRPM5 de las papilas gustativas. Incluso los alimentos calientes liberan los compuestos volátiles, lo que potencia el componente olfativo del sabor.
Mantener una dieta equilibrada. El seguir una dieta equilibrada y saludable, cuidando la elaboración y presentación que nos haga recordar su sabor, podría ayudar a recuperar por completo de la enfermedad.
Seleccionar alimentos de sabores fuertes. Los sabores del queso curado y el jamón y, mezclarlos con verduras o cremas podría potenciar su sabor.
El olfato y el gusto son los sentidos que están relacionados, pero cada uno tiene sus vías de estimulación, por lo que habría que trabajar en ello enormemente y sin desfallecer con el fin de lograr su recuperación al 100%.
Imagen: lavanguardia