El dolor de espalda, la hernia de disco y la ciática casi siempre se debe a posturas incorrectas. La higiene postural es el conjunto de prácticas, cuyo objetivo es el de evitar posturas forzadas que sobrecarguen los músculos y los huesos y, con ello, evitar riesgos y mejorar la salud. Por ello, es importante mantener buenas posturas y evitar acciones que generen una sobrecarga muscular.
Acciones a evitar
- Evita levantar o llevar pesos excesivos.
- Para recoger algo del suelo, evita flexionar la columna. Lo mejor es doblar las rodillas o ponerse en cuclillas.
- Dormir en cama dura, colocando una tabla de madera entre el colchón y la base. Esta posición debería ser boca arriba o de lado y jamás boca abajo.
- Para tomar un objeto elevado sobre una estructura, habría que subir un escalón o escalera hasta obtener el objeto. No se recomienda subirse de puntillas.
- Evita quedarte de pie mucho tiempo. Si hay que estar de pie, lo mejor es separar las piernas y realizar contracciones sin movimientos abdominales y de glúteos. Apoyarse en la pared y dar algunos pasos de vez en cuando para ayudar de manera significativa a no sobrecargar los músculos.
- De preferencia, realizar trabajos sentados usando una silla giratoria con respaldo adecuado para una espalda alineada, la pelvis en línea recta y nunca flexionada. Los pies deben estar en el suelo con las piernas en ángulo recto y nunca colocar una pierna encima de la otra.
- Los codos deben estar pegados al cuerpo y flexionados 90°. Evita emplear sillas con brazos. Los antebrazos, las muñecas y los dedos deberán estar en línea recta y nunca flexionar la muñeca para escribir, ya que esto genera el síndrome del túnel carpiano o pérdida de movilidad, adormecimiento de la mano y sensibilidad.
- Las pantallas de los ordenadores deberán mantenerse a 45° con respecto a los ojos para evitar una fatiga visual y emplear una luz natural en lugar de una artificial, evitando el exceso de reflejos.
- Las piernas deben colocarse separadas debajo de la mesa o el escritorio, con las rodillas flexionadas. Debe existir un espacio entre las rodillas y la silla. Los pies deberán estar apoyados en el suelo.
Como te podrás dar cuenta, estas acciones si se hacen día a día todo el tiempo verás como evitarás una sobrecarga muscular y, por ende, lesiones considerables. Así que vale la pena considerarlos ¿no, crees?
Imagen: fisiocrem