Si eres de esas personas que tienen granos en la frente, quizás te preguntes qué es lo que está pasando con tu piel. Así que para poder acabar con ello, es preciso conocer los motivos para actuar de inmediato y frenar el problema de raíz. ¡Presta atención!
Presencia de acné en la frente
El acné es una manifestación en la piel que se debe a distintos tipos de protuberancias o bultos. Pueden tratarse de puntos negros, espinillas, granos, puntos blancos y quistes. Los adolescentes suelen presentar esta afección por un cambio hormonal en la pubertad.
El tipo de acné que más prevalece entre la población, es el que recibe el nombre de acné vulgaris. Además de los granos en la frente, también pueden aparecer en el pecho, el cuello, los hombros y la espalda.
Las causas del desarrollo, es por el sebo que hay en las glándulas sebáceas de los folículos capilares. El sebo es la grasa que lubrica el pelo y la piel. En condiciones normales, estas glándulas fabrican cierta cantidad de sebo.
Sin embargo, a medida que el organismo comienza madurar, las hormonas estimulan las glándulas sebáceas para sintetizar más cantidad de esta grasa. Pero se pueden activar estas glándulas hasta el punto de ser hiperactivas, generando un exceso de sebo y demasiadas células dérmicas muertas.
Esto suele ocurrir porque los poros se obstruyen y las bacterias pueden quedarse atrapadas dentro de los poros y reproducirse. A consecuencia de esto, la piel se enrojece y se hincha, de esta forma aparecen los granos en la frente.
Así que las personas que tienen granos en la frente y no padecen acné, lo más probable es que hayan tenido una higiene facial inadecuada, el uso de un producto de belleza no indicado para el tipo de piel durante cierto tiempo o una mala alimentación.
Los poros de la piel son muy sensibles a la suciedad. Cuando la suciedad penetra en los poros, puede provocar que se obstruyan muy rápido y, sobre todo, si no se utilizan productos de higiene recomendados.
Por ello es importante incluir una rutina básica que consiste en una limpieza profunda y una exfoliación semanal. Por último, evitar comer un exceso de carbohidratos, ya que ellos favorecen la obstrucción de granos por exceso de grasa.
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