En la actualidad, el dolor se ha combatido con tratamientos médicos especializados y en algunos casos con la inclusión de plantas medicinales que ayudan a mitigar de forma natural. Sin embargo, no todo queda ahí, ya que también existen bebidas que funcionan como analgésicos y pueden ingerirse sin ningún problema debido a que tienen un sabor agradable y son fáciles de realizar.
Zumo de jengibre y piña
Para realizar esta bebida bate una rama de apio, un pepino en trozos (sin cáscara), un trozo de raíz de jengibre (sin piel), un trozo de raíz de cúrcuma (sin piel), 3 zanahorias en trozos y 2 tazas de piña/ananá hasta homogeneizar. Sirve y bebe de inmediato. Puede guardarse en la nevera no más de 48 horas.
Zumo té verde y Pimienta de Cayena
Primero se debe hacer el té verde. Reserva. Una vez con la infusión mezcla con el zumo de un limón y una cucharadita de pimienta de Cayena hasta homogeneizar. Bebe todos los días.
Zumo espinaca y cúrcuma
Esta bebida natural es muy fácil de realizar. Obtén el zumo de un limón y reserva. Bate lo anterior junto 3 ramas de apio, un pepino (sin cáscara), un puñado de espinacas, una cucharadita de jengibre en polvo y una cucharadita de cúrcuma en polvo hasta integrar por completo. Toma por las mañanas todos los días.
Zumo de cilantro y ajo
Resulta un remedio excelente para mitigar el dolor. Pica un diente de ajo, ½ cebolla, un tomate y una rama de apio. Bate lo anterior junto con un puñado de cilantro y una cucharadita de pimienta de Cayena hasta homogeneizar. Si es necesario, incorpora un poco de agua. Cuela y bebe a diario.
Es importante que ante dolores frecuentes, trates de controlar el uso de fármacos que pudieran traer complicaciones en un futuro. Así que es mejor distraerse con aquellas cosas que estimulen la mente como el practicar algún ejercicio o una técnica de relajación (Yoga o Tai Chi) para que puedas sentirte bien.