El estar bajo un régimen alimenticio para perder peso no es nada complicado. Tan solo es necesario aprender a elegir las comidas con un gran valor nutricional. Pero si tienes temor por el temido efecto rebote, toma nota de estos pequeños trucos para sustituir comidas calóricas por comidas saludables para que empieces a habituar al cerebro a estos alimentos benéficos.
Yogur griego en lugar de yogur de sabores
El yogur de sabor no cuenta con ningún valor nutricional, tan solo aromas que hacen alusión al fruto e incluso tienen un elevado contenido en azúcar. En cambio, el yogur griego natural es una buena opción. Ahora bien, a este alimento podrías incorporarle fruta y un poco de avena ¡Seguro te va a encantar!
Chocolate negro en lugar de chocolate blanco o con leche
El chocolate blanco o con leche es de los peores alimentos, ya que no cuentan con un valor nutricional. La mejor opción es el chocolate negro (de un alto porcentaje en cacao). Quizás, en un principio parezca de un fuerte su sabor. Sin embargo, lo aconsejable es ingerir de un porcentaje del 70% cacao e ir aumentado progresivamente.
Frutos rojos en lugar de dulces
Tal vez el comer una bolsa de dulces o golosinas tras una larga jornada sea lo más sencillo para premiarnos por tan ardua labor. Pero es mejor cambiar esa costumbre e ingerir frutos rojos (arándanos, cerezas, fresas/frutillas, moras o frambuesas), ya que estos alimentos tienen nutrientes y azúcar, sin tener que añadirle químicos.
Cereales integrales en lugar de pasta blanca
La pasta blanca es una comida a la que suele recurrirse todo el tiempo. Pero lo ideal es elegir aquellas que son en versión integral, ya que tiene un alto cometido de fibra y nutrientes. Solo habría que hacer hincapié que no se debe duplicar la ración para que no resulte contraproducente.
Así que empieza a redescubrir un millón de posibilidades para comer rico y saludable y, dale la vuelta a esas comidas calóricas que lo único que van a causar son problemas de salud irreversibles.