Según las estadísticas, el adulto pasa de alrededor de 5 horas al día sentado, ya sea frente al escritorio, en la sala o realizando un trabajo que lo obliga estar con esta postura. Pero esto puede traer consecuencias graves, al ejercer una presión considerable en la parte frontal y posterior del cuello que podrían detonar en algo más complicado. Así que es importante frenar todo ello con la ayuda de estos ejercicios.
Movimiento de la barbilla
El ejercicio de la barbilla va a contribuir a alinear la cabeza sobre el torso, bajar la tensión en los músculos del cuello y aliviar la compresión en la columna vertebral. Siéntate recto y coloca tus dedos en lar barbilla. Mantén la mirada hacia el horizonte y empuja la barbilla hacia la garganta hasta que sientas un estiramiento desde la base de la cabeza. Mantén la postura durante 5 segundos y mueve la barbilla hacia adelante. Repite el movimiento 10 veces.
Masaje con pelota
Al masajear con una pelota va a ayudar a recuperar la movilidad del cuello, relajar los tejidos, deshacerse de la rigidez y la tensión de los músculos. Toma una pelota de tenis y masajea la base del cráneo de varias maneras. Si sientes un área tensa, ejerce presión durante unos 2 segundos. Deja descansar y continua con el masaje.
Estiramiento de esquina
El estiramiento de esquina va a ayudar a fortalecer los músculos del cuello y contrarrestar el dolor así como la incomodidad en dicha zona. Párate frente a una esquina de un cuarto o habitación. Junta los pies a unos 60 cm de distancia de las paredes. Pon los antebrazos en las paredes y mantén los codos un poco por debajo de los hombros. Inclínate hacia la esquina hasta que sientas un estiramiento en el pecho. Mantén la postura unos 30 segundos y regresa a la posición inicial.
Postura del camello
Sin duda una asana que ayudará a aliviar la rigidez en los músculos del cuello e incrementará la movilidad de dicha zona. Arrodíllate sobre una esterilla, separando las rodillas a lo ancho de las caderas manteniendo los muslos perpendiculares al suelo. Lleva las manos en la parte posterior de la pelvis. Tira el trasero hacia adelante e inclina la parte superior del torso hacia atrás. Toma los pies con ambas manos (sino pudieses, eleva un poco los talones para lograrlo). Baja la cabeza hacia atrás y mantén la postura alrededor de 30 segundos. Regresa a la posición inicial.
¿Qué te parecen estas propuestas?¿Conoces algunas más para combatir el dolor de cuello? Si es así, no dejes de compartirlas para elegir la que se adecue a nosotros.