El llevar una alimentación libre de carne no debe ser pobre en proteínas, ya que es posible reemplazar aquellos alimentos de origen animal. Pero si aún no tienes idea cuáles son las proteínas vegetales, echa un vistazo a este listado para tener grandes alternativas. Verás que tendrás miles de opciones para crear recetas saludables. Así que apuesta por el alimento orgánico libre de pesticidas y productos manipulados genéticamente.
Garbanzo
El garbanzo es una fuente de proteínas en la dieta vegetariana debido a que cuenta con aminoácidos esenciales. Asimismo, es un alimento rico de fibra lo que ayuda a tener un mejor transito intestinal y te mantiene a raya el estreñimiento.
Lenteja
La lenteja es de las legumbres con un alto índice proteico, siendo la predilecta de veganos y vegetarianos. Sus proteínas no resultan del todo completas, pero si mezcla con un cereal como el arroz hace que tenga una proteína de alto valor biológico. Además, es digestiva al combinarse con alimentos ligeros.
Guisante
El guisante sobresale por su contenido de proteína y su aporte de fibra que ayuda a controlar el peso, al inhibir el apetito. La mejor forma para consumirlo es cocinándolos, pero no más de 5 minutos para evitar que pierda sus nutrientes.
Soja
La soja es una legumbre que se destaca en comparación a otros por su gran porcentaje de proteínas. El incorporar 2 vasos diarios de una bebida a base de soja va a aportar 12,4 g diarios de proteína vegetal. Incluso tiene isoflavonas que alivian los síntomas de la menopausia.
Champiñón
El champiñón es un alimento de gran sabor y 100 g de este hongo aporta alrededor de 4,25 g de proteína. Siendo un gran aliado cuando quieres dejar de lado la carne, la leche y el huevo. Ahora si quieres una dosis extra, puedes mezclarlo con brócoli.
Quinoa
La quinoa es un pseudo cereal que contiene todos los aminoácidos esenciales para el organismo. Además, no tiene gluten ni grasas saturadas, siendo excelente para digerirse mejor. Sin embargo, lo que si tiene es fibra que ayuda a tener un efecto saciante y, por ende, se ingiere menos comida.
Todavía en muchos hogares, el consumo de carne sigue siento muy alto, pero sería una buena opción empezar a reducir su ingesta y suplirla por proteína vegetal. Aunque no está demás acudir con el médico para que pueda valorar la situación.