Quizás en algún momento de tu vida has escuchado hablar sobre el litio, siendo de los elementos más raros. Y es que por lo regular la ingesta de este metal la recomiendan los especialistas de la salud que se vinculan con la psiquiatría. Sin embargo, existen varios alimentos en cantidades pequeñas pero muy nutritivas que podrían ayudar a mejorar nuestra salud, por lo que vale la pena conocer unos cuantos. ¡Sigue la lista!
Cereales
El arroz, el maíz y el trigo son una fuente de litio y, aunque es en pocas cantidades, resulta benéfico para el organismo. Así que puedes verlos en las galletas, los pasteles, los panes, las pizzas, las pastas, el sushi, etcétera.
Frutos secos
La nuez, el pistacho y el maní son de los frutos secos que contienen litio. Estos pueden encontrarse en un mix listo para su consumo, o bien, pueden utilizarse en batidos, bocadillos, pastas y ensaladas, entre otros.
Plantas aromáticas
Las plantas aromáticas como el tomillo y el romero contienen cierta cantidad de litio, lo que trae aspectos positivos a la salud al aportar la dosis necesaria.
Alimentos de origen animal
El pavo, el cordero, el pollo y la carne de res, así como sus derivados como la leche y los huevos contienen pequeñas cantidades de litio, pero que son suficientes para el organismo.
Frutas y vegetales
Las frutas y los vegetales son una clasificación que constituye los alimentos con litio que más aportan al cuerpo. Entre ellos están la remolacha, los garbanzos, las lentejas, los pepinos, los berros, las patatas, las coles, los guisantes, los tomates y el apio.
El consumo de litio no puede excederse ni tampoco minimizarse, ya que un exceso o deficiencia del mismo afecta la lucidez y la concentración, así como la función de la glándula tiroides. Por si fuera poco, puede llegar a afectar el proceso cognitivo y llevar a una anemia. Así que lo mejor es consumir este metal de la forma que nos ofrece la madre naturaleza, ya que viene en sus dosis correcta.