El estómago produce ácidos gástricos que ayudan a digerir los alimentos, esto quiere decir que la acidez estomacal es normal. Lo que no es normal, es que esta sensación se pueda percibir. Y es que cuando el ácido sube por el tubo gástrico se puede identificar una sensación de ardor en el pecho y garganta, lo que se dice que se tiene reflujo o acidez. Esto se debe por comer en exceso o acostarse inmediatamente después de ingerir alimentos. Aunque también existen otras condiciones como el embarazo. Por ello, he aquí algunas bebidas que ayudan a minimizar la sensación de acidez estomacal.
Té de anís
El anís es un digestivo por excelencia que puede ayudar a contrarrestar el ácido gástrico. Para ello, vierte un puñado de semillas de anís en una taza de agua hirviendo. Deja reposar durante unos minutos y bebe.
Batido de avena
La avena ayuda a neutralizar y absorber los ácidos gástricos. Para ello, vierte una cucharada de copos de avena en un vaso de leche o agua. Bate hasta homogeneizar y bebe de inmediato.
Infusión de jengibre
El jengibre es una raíz que se utiliza en varios remedios caseros debido a sus múltiples propiedades. Dentro de ellos está el de aliviar la acidez estomacal de forma casi inmediata. Solo tienes que agregar una cucharadita de jengibre rallado fresco a una taza de agua caliente. Deja reposar durante unos minutos, cuela y bebe.
Yogur
El yogur es un remedio por excelencia que puede proporcionar alivio a la acidez estomacal. De igual forma, si se consume de manera constante ayuda a prevenirla. Lo ideal es consumir el yogur sin azúcar para obtener un óptimo resultado.
Zumo de aloe Vera
El aloe vera es una planta medicinal que puede ayudar a aliviar los malestares digestivos como el tránsito lento, la inflamación y la acidez. Así que toma un trozo de aloe vera, aproximadamente 10 cm. Abre y obtén el gel. Bate junto con agua o el zumo de alguna fruta que no sea cítrica hasta homogeneizar. Sirve y bebe.
Elige el remedio que mejor consideres y recuerda que si el malestar persiste, lo mejor será acudir con el médico para una evaluación minuciosa. No está demás recordar que los buenos hábitos como una alimentación adecuada, evitarán ese tipo de malestar.