Cuando llega el verano y con él, las piscinas a tope. Seguramente se convierten en las mejores aliadas del calor, sobre todo para quienes no viven en costa. Sin embargo, el cloro que tiene el agua puede ser dañino para la piel. Pero si no sabes a qué grado, sigue leyendo para que te enteres.
Reacción de la piel con el cloro
El cloro deteriora el manto graso protector de la piel, por lo que es primordial hidratarla después del baño tanto la cara como el cuerpo. Y es que el cloro tiene hipoclorito de sodio que es capaz de provocar reacciones químicas en la piel, así como hinchazón, irritación y pérdida de melanina.
Así que habría que proteger la piel aportando un extra hidratación con el uso de cremas solares extra resistentes al agua. Asimismo, es necesario cuidar la piel de los rayos nocivos del sol para formar una barrera de prevención y protección.
Además, los efectos del cloro pueden disminuir al realizar un buen mantenimiento de la piscina y seguir ciertas acciones como usar gorro, darse una ducha al salir y aplicar un protector solar.
Ahora bien, si la piel es atópica puede presentar mayor sensibilidad a los efectos del cloro, al presentar una alteración en la barrera de la piel, lo que ocasiona una pérdida de agua a través de la epidermis produciendo sequedad y susceptibilidad a la penetración causantes de irritaciones en la piel.
Las personas con psoriasis también pueden presentar irritación y sequedad en la piel al exponerse en la piscina. Aunque en menor medida que las pieles atópicas.
Así que la próxima vez que vayas a meterte a una piscina, ya sea para refrescarte o como parte de un deporte, es primordial seguir estos simples, pero importantes consejos para que la piel no se dañe. Ahora que si tienes otros tips, no dudes en contarnos todo al respecto.
Imagen: un10enbelleza