El ramen se ha convertido en una opción culinaria de inspiración japonesa, debido a la combinación de aromas, textura y apariencia, además de sus nutrientes y versatilidad. Otra ventaja de este plato, es que es fácil de preparar, siendo una opción caliente, reconfortante y lleno de sabor. Así que a continuación te damos un par de consejos para que puedas realizar un ramen completo y saludable ¡Toma nota!
Ramen y sus ingredientes
El ramen es un plato que ha evolucionado y se ha adaptado en cada país, dependiendo las exigencias y costumbres. Se puede servir frío o caliente con cerdo, pollo, pescado o vegetariano, más o menos picante o dulce.
El ramen aporta fibra, proteínas de calidad, hidratos de carbono y grasas. Lo ideal sería incorporar carnes magras en lugar de carnes con grasas saturadas y usar aceite de oliva extra virgen en lugar de mantequilla o manteca.
Otro de sus grandes beneficios, es que es rico en vegetales, por lo que tiene un contenido considerable de antioxidantes que ayudan a eliminar los radicales libres del organismo.
Los nutricionistas consideran que el ramen pueden ser un plato único por su valor nutritivo y, al ser hervido, es una comida mucho más digestiva. Aunque habría que moderar la dosis de condimentos para evitar emplear mucha sal.
En cuanto a los complementos, el miso ayuda a mejorar la microbiota intestinal y aporta proteínas de alto valor biológico. Otro clásico del ramen es el uso de semillas de sésamo, fuente principal de calcio de origen vegetal.
A la hora de cocinar el ramen, lo mejor es usar ingredientes frescos y de calidad que conserven las propiedades nutricionales, evitando productos instantáneos o con un alto contenido de azúcar, sal o glutamato monosódico.
En cuanto a los fideos, estos pueden ser de harina de trigo, trigo sarraceno, alforfón, guisantes, maíz o soja. Sin embargo, se aconseja buscar los que sean de harina integral y no refinada para poder garantizar el aporte de fibra.
La variedad de topping se podrá elegir dependiendo el país, la región y los gustos, aunque lo tradicional es usar versiones más ligeras o alimentos vegetarianos como tofu o tempeh, setas, semillas de sésamo, perejil, coles de Bruselas, cebollino, lombarda, entre muchos.
Así que la próxima vez que intentes preparar un ramen, recuerda que este sea equilibrado, completo y saludable para darle un extra de nutrientes al cuerpo.
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