El color blanco puro no es el aspecto normal de los dientes. El oscurecimiento de los dientes se da conforme pasan los años y, si lo combinamos, con malos hábitos como un consumo excesivo de vino o café, fumar habitualmente o la ingesta de alimentos ácidos puede hacer que los dientes pierdan el color. Sin embargo, el blanqueamiento dental sigue creciendo en popularidad, ya que es muy accesible el lucir una sonrisa deslumbrante. Pero el intentar conseguir una sonrisa perfecta sin la supervisión de los especialistas, puede causar daños a largo plazo. Así que vayamos a conocer los riesgos del blanqueamiento dental para considerarlos.
Blanqueamiento dental y sus efectos
El blanqueamiento dental puede realizarse de la cara externa del diente o por la zona interna del mismo. Cuando es supervisado por un dentista, resulta un método seguro y eficaz con poco riesgo a largo plazo. En la mayoría de los casos, los efectos secundarios son causados por el uso incorrecto de los productos, o bien, por el uso excesivo.
Los posibles efectos secundarios del blanqueamiento dental a largo plazo son daños en las raíces de los dientes, deterioro del esmalte dental, blanqueamiento desigual de los dientes, sensibilidad permanente en dientes o encías y daño en las membranas de las mucosas bucales.
Asimismo, el uso constante de blanqueadores con peróxido puede eliminar el esmalte dental y causar quemaduras químicas en los tejidos blandos.
Mientras que los efectos secundarios a corto plazo son sensibilidad dental que aparece tras unos días del tratamiento, sensibilidad del cepillado, con el enjuague o el hilo dental e irritación en las encías.
En conclusión, si estás decidido a practicarte un blanqueamiento dental, lo ideal es acudir con profesionales para poder minimizar los efectos secundarios. Ahora que si has pasado alguna experiencia, no dejes de contarnos todo al respecto, ya que será de gran ayuda en la toma de decisiones. Recuerda que es importante cuidar tu boca.
Imagen: clpadros