El aceite de kril es un suplemento que cada día va tomando más adeptos, ya que los beneficios con los que cuenta son realmente significativos para la salud. Dicho suplemento está hecho a base de un tipo de crustáceo muy pequeño (5 cm largo), cuyo color es muy característico debido al carotenoide astaxantina. Siendo una mezcla de antioxidantes, ácidos grasos esenciales (Omega-3, Omega-6 y Omega-9) y fosfólipidos
Minimiza el dolor articular
El aceite de krill ayuda a minimizar la inflamación e incluso mejora los síntomas de las articulaciones y la artritis. Un estudio acerca del consumo del aceite del crustáceo en pacientes con artritis reumatoide u osteoartritis arrojó que, redujo la rigidez, el deterioro funcional y el dolor. Y aunque se requieren más investigaciones para poder respaldar estos resultados, todo parece que va por buen camino.
Mejora los lípidos en la sangre
El aceite de krill parece ser tan eficaz al igual que el aceite de pescado con respecto a mejorar los niveles de lípidos en la sangre. Investigaciones han logrado demostrar que ayuda a reducir los niveles de triglicéridos y otras grasas en la sangre. Asimismo, contribuye a una resistencia a la insulina y el revestimiento en los vasos sanguíneos.
Combate la inflamación
Los ácidos grasos Omega-3 con los que cuenta el aceite de krill han demostrado que tener funciones antiinflamatorias en el organismo. De hecho, este suplemento puede combatir la inflamación de manera excelente. Investigaciones han arrojado que en personas con niveles elevados de grasa en la sangre, tras la ingesta de 1.000 mg diarios de aceite de krill reduce la inflamación en comparación con otros suplementos Omega-3.
Así que no hay duda que el aceite de krill va contribuir enormemente en la salud. Pero habría que considerar su consumo, por lo que es mejor consultar con el médico para ir a la segura. Además, es preciso tener en cuenta que aquellas personas que padecen de alergias al pescado o marisco no pueden ingerirlo, ya que pueden sufrir consecuencias.