Hoy en día el consumo de azúcar está rebasando todo. Algunos estudios señalan que la ingesta de azúcar supone dentro del 15 al 21% de calorías en adultos y de 16 al 26% en niños. Esto quiere decir que la mayoría de adultos consumen de entre 300 a 400 calorías de azúcar al día. El aumento de azúcar ha tenido un impacto negativo en la salud, lo que ha llevado no sólo el aumento de peso sino que también genera problemas de salud como enfermedades cardiovasculares, hepáticas, diabetes, problemas digestivos y hasta Alzheimer, entre otros. Así que el evitar comer azúcar siempre traerá resultados benéficos al organismo. Es por ello que a continuación te enlisto ciertos consejos para deshacerte de ella.
Ingiere grasas saludables
Si quitas el azúcar y los granos refinados a tu dieta, lo más probable es que necesites sustituir algunas de estas calorías por otros alimentos. Es ahí donde las grasas saludables entran al juego. El aceite de coco, de oliva, de aguacate, frutos secos, semillas y mantequillas vegetales hacen que tus comidas sean deliciosas y dejen el estómago lleno por más tiempo. Así que intenta incorporar 1 o 2 grasas saludables en las comidas y snacks para poder estabilizar los niveles de azúcar en la sangre y frenar aquellos antojos.
Incorpora verduras y proteína
Con el azúcar fuera de la dieta, las comidas deben incluir muchas fuentes de proteínas limpias como huevo, pescado y carne, así como una variedad de verduras y hortalizas. Así que intenta que esta mezcla este en tus comidas, ya que te aportará fibra, antioxidantes y nutrientes esenciales.
Evita los edulcorantes artificiales
Aunque los edulcorantes artificiales tienen cero calorías, pueden causar problemas gastrointestinales como hinchazón o diarrea. Si a pesar de ello, quieres seguir consumiendo cantidades limitadas de edulcorantes, opta por los naturales como la miel sin refinar o el extracto de estevia. La canela, el extracto de vainilla y el cacao en polvo son otros ingredientes que te ayudan a endulzar tus recetas.
Duerme lo necesario y aléjate del estrés
Cuanto más falta de sueño y estresados estemos, más antojos de azúcar y alimentos de consuelo queremos. Tanto el estrés como la falta de sueño pueden incrementar la producción de la hormona cortisol que, según estudios está vinculada con la de regularización del hambre, el aumento de peso y los antojos. Así que intenta dormir como mínimo 7 horas cada noche. El ejercicio es una buena forma de controlar el estrés, así como también la meditación, el pasar tiempo al aire libre y el Yoga, entre otros.
Así que sea cual sea la razón por la que quieres probar una desintoxicación de azúcar, debes ser más consciente de lo que comes. Una vez que has identificado las mayores fuentes de azúcar en la dieta, empieza a cambiarlas por alimentos saludables.