Aunque la mayoría tiene el conocimiento sobre los beneficios que trae consigo el tomar una infusión para la salud. El consumir infusiones puede ser una practica que puede llegar a convertirse en un hábito. Es por ello que se han realizado estudios para poder analizar los efectos de su ingesta después de comer. Así que vayamos a ver qué arrojan ¡Te vas a sorprender!
Efectos tras su ingesta después de comer
Las infusiones son productos naturales que en cantidades moderadas no traen efectos negativos al organismo. Pero tampoco habría que abusar de ellos. Además de ello, es preciso tener en cuenta que su objetivo se va a conseguir de a poco, ya que se trata de algo acumulativo. Así que cuando solemos echar mano de estos tés después de las comidas, puede resultar con grandes ventajas.
- Aporta esa sensación de saciedad. Aparte de tomar una bebida de gran sabor, habría que sumarle esa sensación de saciedad después de la comida. Y es que sentir que nos queda ese huequito en el estómago para comer algo más, podría llevarnos a pique, al agregar calorías a las ya ingeridas.
Además, una infusión puede ser el gran sustituto a un postre, evitando ingerir grandes cantidades de azúcares y harinas refinadas que ponen en juego a la salud.
- Mejora la digestión. Después de comer y al beber una infusión ayuda a mejorar la digestión. Y es que las infusiones tienen principios que aceleran y mejoran el proceso digestivo. Sin embargo, hay tés que sobresalen en esta labor y son aquellos que contienen sustancias excitantes como la cafeína o la teína, al acelerar el metabolismo.
Aunado a lo anterior, hay infusiones que son benéficas para la digestión y minimizan los gases derivados de la fermentación de los alimentos. Dentro de ellas está la infusión de anís o menta. Incluso evitan la hinchazón y pesadez por digestiones pesadas.
Así que el ingerir una infusión después de la comida viene de maravilla, por lo que no eches en saco roto su ingesta, siempre que sea con moderación ¿Cuál es tu favorita?